domingo, 10 de enero de 2016

HÉROES EN EL ASFALTO Y EN LA GUERRA (parte I)

Esta historia puede parecer una mera invención salida de la mente de algún novelista británico. Pero no, fue real aunque desafortunadamente está muy poco documentada -apenas un libro del periodista Joe Saward titulado The Grand Prix Saboteurs y que no se ha traducido al español-. Pero merece ser brevemente reseñada. Todo ello se desarrolló durante la Segunda Guerra Mundial, un acontecimiento que permitió que el automovilismo y el servicio secreto británico clandestino en la Francia ocupada se dieran la mano.
Debemos situarnos en el periodo de entreguerras, concretamente en la década de los años 20, cuando un piloto desconocido que corría con el seudónimo de “W. Williams” se impuso en el primer Gran Premio de Mónaco celebrado en 1929 por delante del gran favorito, el alemán Caracciola. Muy poca gente sabía de sus orígenes y él mismo se encargó de alimentar los rumores puesto que se presentaba como un deportista suizo multimillonario o bien, como chofer en París para familias adineradas. La realidad es que este piloto nacido en Montrouge en 1903 se llamaba William Charles Frederick Grover y era hijo de un británico y de una francesa, pero tras trabajar como conductor en la capital de Francia su pasión por las carreras le hizo decantarse por la competición automovilística. Pero siempre participaba con seudónimos para evitarle preocupaciones y disgustos a su madre. Y le fue bastante bien, pues ganó dos GP de Francia (1928-1929) y el GP de Bélgica de 1931.
Solo la guerra pudo sacarlo de su plácido retiro, a caballo entre sus propiedades en París y en la Riviera francesa. En 1939 no dudó en alistarse como soldado en el ejército inglés, sirviendo como chófer para generales por el norte de Francia, pero la rápida victoria alemana sobre las tropas francesas mediante la guerra relámpago o “blitzkrieg” en 1940 hizo que se retirara a Inglaterra junto. Tras esta infructuosa experiencia, un giro del destino iba a permitirle participar en la guerra de una forma más activa. El servicio secreto Special Operations Executive (SOE), buscaba a soldados ingleses que dominaran el francés y estuvieran dispuestos a lanzarse en paracaídas para iniciar una guerra clandestina a pequeña escala, en la que actuaría no con armas sino haciendo uso de su ingenio personal, en el que debía provocar sabotajes y pequeños atentados con escasos recursos. Grover aterrizó en Francia en el mes de junio y llegó a París por sus propios medios. Allí debía cumplir una serie de órdenes dirigidas a crear una red durmiente de espías que colaborara con la Resistencia Francesa. Sus acciones estaban  destinadas a desestabilizar posibles acciones de agentes alemanes, manteniendo un perfil bajo y procurando tener un papel pasivo. Para crear dicho grupo de espionaje, Grover reclutó nada menos que a otro piloto de automóviles, Robert Benoist, quien era en esos momentos la mayor estrella francesa de los años 20, al haber ganado los Grandes Premios de Francia, España, Italia y Gran Bretaña en 1927, así como las 24 Horas de Le Mans diez años después. Y sería la red dirigida por Grover la que contribuyó en gran medida a que la fábrica de Citroën de París viera mermada su producción de camiones para las tropas alemanas junto a las acciones de los propios trabajadores de la cadena de montaje, quienes modificaban la estructura del motor haciendo que no fuera lubricado de forma adecuada por lo que muchos automóviles quedaban inservibles. De hecho, en 1942 se construyeron 9.320 vehículos pero al año siguiente la factoría ocupada por los alemanes redujo el número a la mitad y fue cerrada.


http://100percentf1.weebly.com/uploads/2/6/7/3/26738575/4167874_orig.jpg


https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLLRQyl-eOVI0AwQQxGO4wcnxz0DeW9Or247uE1VxbAGbLD6hBIbNeHIxrUv3JxX7QRjHogF8b-zoBP1Vx4jxHGvC3CykbdcB4tFrG-Mgl74CBS2ZD0rk-uq9uIst5tyr3p4zUr0l6xSx_/s1600/Benoist1927_FrenchGP.jpg

                                                                                                               - Olof.

1 comentario: